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4 mar 2021

Oloroso Bertola 12 Años, de Díez-Mérito.

Oloroso Bertola 12 Años
Palomino Fino 100%
19% vol
Bodega Diez Mérito 
D.O. Jerez

 

Empezamos Marzo de 2021, tras la festividad del Día de Andalucía, con un gran vino de Jerez, un Oloroso por derecho, con 12 años de crianza oxidativa o físico-química, elaborado por una bodega histórica como es Bodegas Díez-Mérito.

Las bodegas Díez-Merito, actualmente propiedad de la familia Espinosa, de Jerez, han pasado por un largo recorrido histórico desde que en 1876 se fundara la Bodega Díez Hermanos, por los hermanos Díez y Pérez de Muñoz, que curiosamente eran diez hermanos, si bien fueron dos Manuel y Salvador los fundadores de la bodega; todo tiene Cádiz un doble sentido. Más adelante, ya en el siglo XX, al adquirirlas bodegas del Marqués del Mérito, pasaron a ser Bodegas Díez-Mérito, antes de que entrara en acción Rumasa y toda aquella movida de los 80. Después, el riojano Marcos Eguizabal se hace con ellas tras la quiebra de Rumasa. Finalmente vuelven a manos jerezanas cuando en 2016 la familia Espinosa las adquiere, refundándolas como Bodegas y Viñedos Díez-Mérito, y con dos edificios emblemáticos: la Bodega Bertemati, de 1790, y la Bodega El Cuadro, donde tiene su despacho de vinos, así como la Viña El Diablo, la histórica Viña El Caribe, y otra en Gibalbín, Las Mezquititas.

Por otro lado, el nombre de Bertola resulta que es una españolización, por decirlo de alguna manera, del apellido inglés Bartle, que se pronuncia más o menos 'bértol' o 'bártol', apellido de la familia Craven-Bartle que se asentó en Jerez entre los siglos XIX y XX y acabaron fundando la bodega  - no poco importante - Bertola S.A.

(Etiqueta de Jerez Oloroso de Bertola S.A.)



(Antiguo marca de Díez Hermanos)


(Bodega Bertemati, de Díez-Mérito)
 

Más de una vez he oído y a veces hasta lo he leído, que Jerez era tierra de Olorosos, mientras que El Puerto lo era de Finos. Conceptos, claro está, de antaño, ya que hoy día se hace de todo en todos sitios, pero el oloroso era el vino clásico de Jerez. En el caso del Oloroso Bertola 12 años, hablamos de un vino que se elabora a partir de un mosto de Palomino Fino, que tras la fermentación, se encabeza a 18% vol. de alcohol mediante la adición de alcohol vínico, para pasar a las solera de oloroso para una crianza oxidativa de hasta 12 años en viejas botas de roble americano de 500 litros. 

Esta podría ser y de hecho es, la elaboración actual de la mayoría de los olorosos, ya que parece que se está perdiendo la  - digamos - tradición del segundo encabezado, esto es, encabezar el mosto ya fermentado a 15%, los mostos más finos, dejarlos durante uno o dos años en bota con crianza biológica y en una segunda clasificación encabezarlos a 18%, con la consiguiente pérdida de flor.

Oloroso Bertola es de coloro caoba oscuro, con algún reflejo cobrizo,  profundo, con abundante lágrima glicérica. Nariz intensa, de notas tostadas, frutos secos, fruta escarchada, y aromas de madera vieja, barnices. En boca es muy seco, amplio, con volumen. Se nota cálido y muy largo.

En un gran oloroso con una alta relación calidad/precio ideal para consumir casi en cualquier momento y en cualquier ocasión.

 

__________________________
Bodegas y Viñedos Díez Mérito
https://diezmerito.com/




15 ene 2021

Manzanilla Cuestecilla, de Bodegas Delgado Zuleta.

 

Delgado Zuleta presenta Cuestecilla,

 una manzanilla de otro siglo.

 

  •           El origen de su solera se ubica en un casco bodeguero ya abandonado del Barrio Alto de Sanlúcar.
  •      Por su condición de Single Cask, solo habrá una única edición de 600 botellas numeradas.  


Sanlúcar de Barrameda, a 15 de enero de 2021. 

Delgado Zuleta comienza el año lanzando al mercado Cuestecilla, una nueva manzanilla con múltiples factores diferenciales que la hacen muy singular. Será el primero de los 5 nuevos proyectos que la centenaria bodega sanluqueña va a ir presentando en la primera mitad de este 2021.

 El origen de este vino se remonta a la época en la que Delgado Zuleta aún disponía de numerosos cascos de bodega diseminados por el núcleo urbano de Sanlúcar, allá por la década de los 80 del pasado siglo. En el triángulo formado por las calles Albaicín, Cristo de las Aguas y Cruz del Pasaje, en el Barrio Alto sanluqueño, se ubicaba la nave Cuestecilla. Una bodega en la que confluían numerosas circunstancias que favorecían extraordinariamente la crianza biológica, como la monumental parra que cubría el patio y que proyectaba sombra durante todo el día sobre las paredes de la bodega o la humedad aportada por las corrientes freáticas que discurrían por el subsuelo en ese punto de la ciudad.

 Sabedores del tesoro que tenían entre sus manos, una de las principales preocupaciones de los capataces cuando en 1989 se inició el traslado de Delgado Zuleta a su actual emplazamiento en el Pago de las Dehesillas, fue precisamente encontrar una ubicación adecuada para este soleraje de Cuestecilla que le permitiera al velo de flor seguir desarrollándose con la misma viveza, lo que tras muchos estudios se logró finalmente en un privilegiado rincón de la bodega 250 Aniversario, donde desde entonces ha formado parte de la solera de La Goya. 

 De esta ya de por sí exclusiva solera, el enólogo de la bodega, José Antonio Sánchez Pazo, ha seleccionado una única bota y la ha vaciado completamente, creando de esta manera una manzanilla Single Cask. Al contrario de la práctica habitual al llenar los vinos generosos, tomando una porción de muchas botas buscando la uniformidad, se ha optado por crear un vino único, que jamás se repetirá en la historia, puesto que todo el vino contenido en la bota se ha usado para llenar las únicas 600 botellas numeradas a mano que componen la edición única y limitada de Cuestecilla, que se presenta en una elegante caja de madera.

 Su creador, José Antonio Sánchez Pazo, la califica como “una manzanilla muy emocionante, es de esos pocos vinos que te erizan el vello porque contiene el alma, la esencia y el espíritu de la bodega pero multiplicado exponencialmente”.

 Desde el punto de vista organoléptico, Cuestecilla es una manzanilla -con más de 6 años de crianza- con un color amarillo dorado brillante, que deja un lagrimeo en la copa que da indicios de su estructura. En nariz se presenta muy punzante e intensa, con notas frescas y salinas y una presencia muy evidente de la viva crianza biológica de la que ha disfrutado. En boca es explosiva, untuosa, redonda y de gran persistencia.

 Cuestecilla forma parte de la gama de vinos La Casa, la selección de vinos de Delgado Zuleta consagrada a rescatar tesoros de sacristía que hasta ahora sólo podían disfrutar las familias propietarias de la bodega, como el amontillado VOS Viejo Zuleta o el médium Las Señoras.





 

Sobre Delgado Zuleta

Delgado Zuleta nace en 1744, lo que la convierte en una de las bodegas más antiguas del Marco de Jerez. En 1918 toma el nombre artístico de una famosa bailaora, La Goya, para su principal manzanilla, y en 1987 se fusiona con la bodega Rodríguez La-Cave. 

Tiene el privilegio de ser proveedor de la Casa Real, y además de contar con botas firmadas por Alfonso XIII y Victoria Eugenia, los príncipes de Asturias eligieron su manzanilla para su enlace en 2004. En su porfolio de productos cuenta con diferentes gamas, como Zuleta y Monteagudo, donde conviven todo tipo de vinos tradicionales (manzanilla, amontillado, palo cortado, oloroso, cream, pedro ximénez y moscatel). 

Sus marcas más emblemáticas son las manzanillas Barbiana y La Goya y su amontillado VORS Quo Vadis? En los últimos años se ha destacado por un intenso proceso de diversificación, con lanzamientos tan destacados como el vermú Goyesco y la gama Lola, de vinos tranquilos.   

[Nota de Prensa]


7 jul 2019

Lustau Vintage Sherry 2002


Lustau Vintage Sherry 2002
Palomino 100%
18,5% vol.
Bodegas Lustau
DO Jerez
Lo van a sacar en breve al mercado si es que no lo han hecho ya. Se trata de la nueva cosecha, 2002, de este excepcional vino dulce natural elaborado con Palomino fino, mediante vendimia tardía, esto es, dejar la uva unos días más sin vendimiar para que madure algo más de lo normal, a fin de que el contenido en azúcar y por consiguiente, el grado alcohólico natural también aumente, aunque sigue siendo un vino fortificado, es decir, que se le añade alcohol vínico hasta los 17º para que no siga fermentando y quede ese nivel de azúcar residual.
Es un vino raro, no cabe duda, pero raro por inusual, por atípico en Jerez, donde los vinos dulces suelen ser a base de Moscatel o Pedro Ximenez, y los que contienen Palomino suelen ser los Cream o los Medium, pero eso se refiere a los vinos con crianza mediante el sistema de soleras y criaderas, es decir, sin añada. En este caso estamos ante un vino de añada, con crianza estática durante 17-18 años, y repito, 100% Palomino.
Además, las botas donde envejecen estos ‘vinos de añada’ están lacradas y selladas por el Consejo Regulador, durante todos esos años, y si se abren será en presencia de un técnico del Consejo, que las volverá a sellar hasta el día definitivo de su embotellado. Esto hace de garantía de que lo que se dice es rigurosamente cierto, y que el vino envejece los años que se dice.


Aquí tenéis una imagen, aunque es de hace muchos años, de una de estas botas selladas. Como veis, imposible manipularlas porque lleva sellos de lacre, no sé si plomo, las cintas, etc.


La uva Palomino para este vino de añada procede de la Viña Montegilillo, una viña que posee la bodega también en una zona atípica, junto a la Nacional IV unos km antes de El Cuervo, de cuando la bodega Emilio Lustau pasó a manos de Caballero en 1990. Una viña de unas 30 Ha, de suelo de albariza, de las que reservan 2 o 3 Ha. para la vendimia tardía de este vino.

De color caoba oscuro, traslúcido, con densidad evidente, la nariz es impresionante. Aromas de todo tipo, complejidad a raudales: frutos secos, naranja escarchada, higos secos, mieles...en boca es intenso, sedoso, con acidez entremezclada con el dulzor, que no empalaga. Un vino grande en todos los sentidos.

La producción de esta añada 2002 no llega a las 6000 botellas, y encima de 50 cl. Escasísimo. pero es que lo bueno, lo muy bueno, viene en formato pequeño...eso dicen. Pruébenlo si se cruzan con él.








18 abr 2018

Forlong da en el blanco.




Que la uva Palomino fino está viviendo unos de sus mayores momentos de gloria de los últimos años es algo que cualquiera que habite ese neopaís  - divertido, eso sí - que yo llamo Frikilandia - con sus provincias Twitter, Facebook e Instagram, no le habrá pasado por alto. Se suceden por doquier cada vez más vinos blancos de Palomino de distintos pagos, viñas, distintas elaboraciones, de bodegas grandes, de bodegas pequeñas, viticultores y enólogos independientes; no hay nadie que no quiera experimentar por si mismo con alguna partida de Palomino sobre albariza, algunas tan reducidas a apenas una bota de contenido.
Hablamos de Finos, de Manzanillas de Sanlúcar? No. Hablamos de vinos blancos.

Sin duda alguna, Bodega de Forlong, en El Puerto de Santa María, es de las que está apostando más firmemente por esto vinos, pues son ya cinco los vinos blancos que elabora, todos diferentes, todos distintos, pero todos con un nexo común que los une, aparte del elaborador: Palomino & Albariza.
Alejandro Narváez y Rocío Áspera, son sus sonrientes y amables propietarios, ambos con formación técnica, experiencia y, en el caso de Ale, esa ascendencia francesa que lo explica todo.




Forlong Blanco 2016: Tradicional vinificación en blanco, aunque lleva en su ensamblaje algo de Pedro Ximénez, un 10%. Fue el primer vino blanco que sacó la bodega, aquella primera cosecha de 2013 que sirvió de presentación junto con Forlong Assemblage 2012.Ya ha pasado tiempo.
Palomino de la viña de Forlong con selección en viña y en mesa. Prensado neumático. El mosto es enfriado a unos 5-6 grados durante unas 36 horas y trasegado a un depósito de acero inoxidable donde fermenta con una subida gradual de la temperatura hasta los 15º, durante unos 20 días. Finalizada la fermentación se trasiega a otro depósito donde permanece en contacto con sus lías finas, con un ligero removido semanalmente. Finalmente se realiza el ensamblaje con pequeño aporte de  Pedro Ximénez, y el vino resultante termina por clarificarse de manera natural por decantación, y se embotella sin filtrar.


Forlong 80-20 2016: El origen del nombre de este vino es porque la primera cosecha que se hizo, que fue la 2015, llevaba un 20% de uva Palomino de la Viña Plantalina, en Balbaína Alta, pero fermentada en contacto con los hollejos de la uva. El resto, un 80%, era también Palomino, del propio viñedo de Forlong, pero elaborado de manera tradicional, vinificación en blanco clásico.
La siguiente vendimia, el vino conserva el nombre 80-20, pero en realidad es ya el 100% del Palomino de Viña Plantalina el que se macera y fermenta durante unos 25 días en contacto con los hollejos pero de uva Pedro Ximénez, que es aquí donde subyace la 'rareza' de este vino. Se extraen así  mediante este maceración pelicular - lo que no quiere decir que todo esto sea una película  - aromas muy particulares de la variedad Pedro Ximénez.

Forlong Amigo Imaginario 2016: Palomino, también de la Viña Plantalina, en Balbaína Alta, junto a la carretera Jerez-Sanlucar. Son unas cepas de unos 50 años trabajadas en ecológico desde hace más de 15 años. Se realiza vendimia manual en cajas pequeñas con selección de racimos. La uva es enfriada durante 24 horas a 3-4 grados. En mesa de selección se escogen las uvas en perfecto estado sanitario, se despalilla, y la uva entera pasa a un deposito hermético donde comienza una fermentación espontánea. Se le realiza bazuqueo diario,es decir, removido, para potenciar el contacto con los hollejos de la uva, tal y como se hace al elaborar un vino tinto. Finalizada la fermentación tras 25 días, ya que es una fermentación lenta a baja temperatura, la pasta se prensa y el mosto se trasiega a una bota envinada de oloroso, llenada completamente y cerrada herméticamente para evitar oxidaciones y posible aparición del velo de flor. Ahí el vino realiza una fermentación maloláctica, y donde permanece durante unos 10 meses. Finalmente y una vez embotellado sin filtrar, apenas lo que da de si una bota de 600l, el vino pasa otros 4 meses
de maduración en botella.



Forlong Mon Amour 2016: es un vino blanco con crianza en barricas de roble francés durante unos 10 meses. Palomino del viñedo propio que rodea la bodega, en Balbaína baja. Vendimia nocturna, manual, con selección de racimo, y selección de grano en mesa. Así se garantiza un estado sanitario óptimo de la uva. Despalillado y prensado neumático. Desfangado por gravedad en depósito de acero inoxidable y posterior fermentación en barricas de roble francés. Crianza durante unos 10 meses con removido o battonage cada dos o tres meses para poner en suspensión las lías finas que hayan podido decantar en el fondo.
"Un Leflaive andaluz se animaba a categorizar un crítico de vinos. Desde luego muy afrancesados, tanto éste como el siguiente, La Fleur. Borgoña, Jura...


Forlong La Fleur 2015: Palomino fino de la propia finca de Forlong en el pago de Balbaina baja, una viña muy trabajada y muy mimada, sobre tierra Albariza. Asoleo de uvas durante unas 48 horas para elevar de forma natural el grado de alcohol potencial. Posteriormente se prensa la uva, se desfanga, es decir se limpia de restos sólidos y se lleva acabo una fermentación en botas de fino y con crianza estática de añada de dos años bajo velo de flor en bota jerezana de 500/600 litros. Por supuesto, se embotella sin filtrar, en botellas de 50 cl. Escasísimo.
La Fleur ha sido la última novedad, albariza, velo de flor, crianza...reminiscencias a Jura y su Savagnin, manzana asada, sapidez, cuerpo. Alejandro dice "crianza biológica en su máximo esplendor".

Pocas bodegas pueden presumir de tener una gama de vinos blancos tan extensa, completa, con mayor complejidad, con menos complejidad, interesante como Bodega de Forlong. Y menos aún lo pueden hacer trabajando con la misma variedad de uva como protagonista: la injustamente calificada como neutra, insípida, inodora, vamos como el agua, e inexpresiva Palomino. Cuando lo más frecuente en un mundo 'tintocentrista' es dispones de una gama de vinos tintos para todos los gustos y colores, más joven, menos joven, monovarietal, o en coupage con distintas variedades de las llamadas mejorantes, no pocas veces 'empeorantes'esta joven Bodega de Forlong apuesta por buscar diferentes tipos de terruños, suelos de calizas de distinto tipo.

Me quedo con los cinco, y a esperar al año que viene que llegan más cosas...!!!

25 ene 2018

Pago de Macharnudo, Pago del Carrascal y Almocaden. Jerez

(2ª Parte)

Como dije en la entrada anterior, publico esta vez otro trozo del Mapa Guía del Parque Natural de la Bahía Cádiz, escala 1.50.000, editado por la Junta de Andalucia y el Instituto Geografico Nacional en 1992, y que tenía traspapelado por casa. En esta ocasión se trata del trozo que incluye el Pago de Macharnudo, el Pago de Carrascal, el Pago del Almocaden, además de el Pago Cerro de Santiago, Cerro Corchuelo y el Pago del Amarguillo, estos últimos, quizás en una segunda categoría como "subpagos" (existirá ese término...?).

PAGOS DE MACHARNUDO, CARRASCAL Y ALMOCADEN



Cotas topográficas destacables en este trozo de mapa son los 136 msnm del vértice Haurie, en Macharnudo, que además es vértice geodésico, en cuya cima se construyó una estatua del Sagrado Corazón; los 114 msnm de Cerro Corchuelo, los 112 msnm en Viña del Corregidor o los 94 msnm del Cerro de la Carpintera.

Aparece la Casa de la Compañía, en Macharnudo Alto, La Panameña, La Escribana, recientemente adquirida por Bodegas Luis Perez, de donde sale su Vino de Pasto 'La Escribana',  además de el propio Majuelo de Domecq, hoy propiedad de Bodegas Fundador. Numerosísimos son los vinos antiguos y no tan antiguos que hacen mención en sus etiquetas a este afamado pago jerezano: Agustín Blazquez, Pedro Domecq, Marqués del Mérito, C.del Pino*, etc., indicaban que sus uvas procedían de este pago. Hoy en día, bodegas como González Byass también hacen mención a este hecho.

Imágen de etiqueta de Todocolección.net
* "C. del Pino": Bodega Cayetano del Pino



Sagrado Corazón, en Haurie.
(Foto de Rafael de la Cruz, de Enotour)


En El Carrascal, por supuesto, el Cortijo de la Canariera y Cortijo Romano, de González Byass,  El Corregidor, El Telégrafo, etc. Vinos antiguos de González Byass hacían mención a Viña Romano en sus etiquetas, y Bodegas Sandeman, que fue propietaria de El Corregidor, también hacia mencion a esta viña en algunos de sus vinos.
De la viña de El Corregidor proceden hoy día las uvas de palomino con las que las Bodegas Luis Pérez elaboran sus vinos sin encabezar de la gama La Barajuela (Fino, Oloroso y Raya)

Cortijo El Corregidor




En el Pago del  Almocaden, el Cortijo Matamoros o Cortijo Romana Grande. Curioso apelativo el de Almocadén, nombre que también tienen unas bodegas jerezanas de la calle Jardinillo, Bodegas Almocaden. 
Dice de el mismo don Diego Parada y Barreto en su libro "Noticias sobre la Historia y el estado actual del Cultivo de la vid y del Comercio vinatero de Jerez de la Frontera" (gran título, por cierto):

Este pago, uno de los más estimados por sus productos, se halla comprendido entre Carrascal y Macharnudo al N. de la población y orillas del camino de Trebujena, donde recibe este el nombre de hijuela del Almocaden: comprende de unas 90 a 100 aranzadas con excelentes tierras albarizas y sus vidueños son el palomino y una parte de mantúo moscatel y otras especies: su viña más notable es la llamada Matamoros, nombre que parece tener relación con el del pago, que es árabe, y significa como es sabido capitan ó caudillo de tropas guardadora de los campos.


En fin, hay que ver lo que da de si el mapita dichoso: Parque Natural de la Bahía de Cádiz. Seguiré la próxima vez con la zona de Sanlucar y Chipiona, donde también aparecen Miraflores o el Carrascal sanluqueño, pues efectivamente son dos los pagos con ese nombre.

[Actualizado a Enero 2020



2 jun 2017

Viña Galvana 2016, de Delgado Zuleta.

Viña Galvana 2016


Viña Galvana 2016
Palomino fino (85%) y Moscatel de Alejandría (15%)
11% vol.
Bodegas Delgado Zuleta
Vino de la Tierra de Cádiz

Nueva vendimia, nueva cosecha, nueva añada para Viña Galvana, de Bodegas Delgado Zuleta, un vino blanco de la Tierra de Cádiz elaborado con las variedades Palomino Fino (85%) y Moscatel que presenta ahora a principios del mes de Junio su nueva cosecha.

En realidad Viña Galvana no es un vino nuevo, es una marca que Delgado Zuleta lleva trabajando desde los años 70. Sí es cierto que en los últimos años, en general, se está apostando aún más si cabe por los vinos blancos de Cádiz, (marketing incluido...sí), algunos a base de Palomino sola, y otros mezclándola con algo de Moscatel o incluso algo de Pedro Ximénez, por algo son las tres variedades blancas más plantadas en Cádiz, y las únicas permitidas - aunque no es el caso - en el Consejo Regulador Jerez-Xeres-Sherry.

Merece la pena destacar en primer lugar la etiqueta del vino, yo soy muy de etiquetas. Hace dos años se incorporó en la misma dos elementos clave en la idiosincrasia sanluqueña: las Carreras de Caballos en la playa de Bajo de Guía, fiestas declaradas de interés turístico andaluz, nacional, internacional  e interplanetario, si me apuran, que todos los años allá por Agosto tienen lugar en esa playa, y por otro lado el sector pesquero que en el Guadalquivir y frente a las costas de Doñana no es que sea importante, es que es fundamental para, entre otras cosas, tomarte una copa de Viña Galvana con un pescado al horno o unos Langostinos de Sanlúcar. Es más, es que puedes hacerlo todo a la vez: carreras de caballos incluído, y durante la puesta de sol, detalle que también viene reflejado en la etiqueta. 
Es que está apeteciendo que llegue Agosto, pero yá!.

En segundo lugar, el contenido; el vino, vamos. Creo que se está acertando al incluir algo de Moscatel - vinificado en seco, es decir, que el vino no es nada, nada dulce, si acaso algo afrutado, pero muy leve - en el coupage de los vinos blancos de Cádiz. Lo hace más fresco. Alguna bodega, incluso llega más allá y añade algo de Pedro Ximénez, también en seco.  En este caso, y quizás la mano del nuevo enólogo de la bodega Jose Antonio Sánchez Pazo esté detrás, estamos ante un vino muy bien elaborado, muy bien trabajado.  Es refrescante, ligero, sabroso, muy natural, en el sentido amplio de la palabra, y por supuesto muy agradable.

Por cierto, nos cuentan desde la bodega Delgado Zuleta, que trabajan en colaboración con la Cooperativa Católico-Agrícola de Chipiona, sin duda uno de los mejores sitios a donde acudir si buscamos Moscatel de Chipiona, bueno, bueno.

En resumen, que ya tenemos disponible el nuevo Viña Galvana 2016, que de esta cosecha se han elaborado unas 18.000 botellas, y malo será que alguna de ellas no caiga en vuestras manos si bajáis por Cádiz este verano. Seguro, que os gusta.






19 mar 2015

Vinos para el Día del Padre.

Dos vinos tengo pensado abrir en estos días entorno a la festividad de hoy, día de San José, o sea, el dichoso Día del Padre; primero por que lo soy, y por partida triple, además, y segundo por que sí, por que creo que son vinos que me van a transmitir sensaciones, ciertos valores tradicionales que creo que se están perdiendo. Uno es tinto, el otro es blanco; unos es del norte, el otro es del sur. Uno gallego, el otro gaditano, con ese nexo de unión que siempre han tenido Galicia y Cádiz. Sin embargo, es más que probable que tengan muchas más cosas en común.

Sílice 2013 y Alba Sobre Tabla 2013, elaborados por Sílice Viticultores y Alba Viticultores, respectivamente: ya tenemos la primera coincidencia. Viticultores, no bodegueros ni enólogos ni nada de eso. Viticultores - con todos mis respetos a los enólogos, aunque me soltara uno hace tiempo esta máxima: 

"Oye! Que yo no soy enólogo, que yo sólo hago vinos"



Y parece que hasta los nombres son toda una declaración de intenciones: Sílice, es el nombre del compuesto principal de varias rocas, entre ellas la pizarra, tan común en los suelos del Priorato y de la Ribeira Sacra. La arena de playa es sílice casi al 100%, el cuarzo; y Alba, de Albariza, la tierra típica del Marco del Jerez; una marga, calcárea, de origen geológico completamente diferente a la pizarra pero que contiene también sílice.... La pizarra es de color oscuro, la albariza es blanquecina. Seguimos con las diferencias. ( no me voy a meter en más asuntos geológicos primero por que no es mi tema, y segundo por que esto se supone que es un blog de vinos).

Ni si quiera coinciden en las variedades, obviamente: Sílice es una Mencía, de la subzona de Amandi, en la Ribeira Sacra, entre las provincias de Orense y Lugo. Alba es Palomino Fino, también llamada Listan en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz). Ambos elaborados con viñedos viejos, de esos que ya poca gente cuida, quien sabe, 40, 50, 60 años, trabajados a mano - en la Ribeira Sacra sería imposible otra cosa, fíjense que imagen aquí abajo...)  de día y de noche, de lunes a domingo, sin festivos, aunque hoy lo sea...

Foto de Sílice Viticultores

Me imagino vinos hechos a la antigua usanza, con poca o ninguna tecnología, vinos de artesanía. Hay tropecientos eufemismos: vinos de garage, vinos de autor, vinos como los que hacía mi abuelo, el padre de mi padre, vinos como los de antes, ...
Así que ya saben, la tierra, la viña, el susodicho terroir; parece que todo gira ya entorno al suelo. Como antes. Hay mucho que contar.



Albariza jerezana

20 ene 2015

Encrucijado 2012. El Palo Cortado.

Encrucijado 2012
Palomino 50% y otras*
15.5% Vol.
Vino Generoso de Licor

Sanlucar de Barrameda
Sin D.O.

Seguramente cuando acaben de leer este post - si lo acaban - comprenderán que no ha podido ser más acertada la elección del nombre de este vino: Encrucijado. Toda una declaración de intenciones, pues no debió ser nada fácil para Ramiro Ibáñez la elaboración de este vino único, pues actualmente no hay nada en el mercado de estas características. Un palo cortado joven, eso es Encrucijado. Un vino 100% artesanal, cosecha del 2012, fermentado en bota de roble americano,  con 12 meses de crianza biológica, y otros 12 meses de crianza oxidativa tras desaparecer el velo de flor. Elaborado con seis variedades autóctonas, cinco de las cuales casi extinguidas, como son Beba, Cañocazo, Perruno, Mantúo de Pilas y Mantúo Castellano, con un 10% cada uno; el otro 50% de Palomino. Producción limitada a 685 botellas de 50 cL.

En palabras que el propio Ramiro explicó en Verema.com:

" ...se trata de una elaboración 100% artesanal, volviendo a reproducir las condiciones de materia prima y elaboración de hace más de 30 años, cuando aún se fermentaba en bota y todavía quedaba cierta superficie considerable de otras variedades no amparadas actualmente.

Toda la uva ha sido cortada a mano, pisada física y literalmente a pie  y fermentada en bota. Está compuesto por un 50% de Palomino, seleccionando los racimos interiores de las cepas para que preservaran más ácido málico. Y el otro 50% son 5 variedades autóctonas con un 10% de cada una de ellas. El vino a pesar de estar en estas latitudes no ha sido necesario acidificarlo, ni clarificado ni filtrado.
Con ese trabajo de campo y esas condiciones de elaboración, se ha intentado favorecer niveles más altos de ácido málico, que luego se tradujesen en el perfil organoléptico característico del Palo Cortado, donde destacan cantidades considerables de ácido láctico (lactatos), además de posibles ciertas cetonas, acetales y lactonas.

Ha quedado refrendado en multitud de análisis de solerajes muy viejos de Palos Cortados las altas concentraciones de ácido láctico con respecto al resto de jereces. (Se prevé que salga documentación científica al respecto en poco tiempo.) Este compuesto es fundamental para dotar al Palo Cortado de esa sutileza y amabilidad en nariz, con aromas cremosos a veces muy evolucionados y/o combinados con otros (caramelo, yogurt, dulce de leche, chocolates, toffee, etc) que lo hacen diferente al Amontillado y al Oloroso.

Se ha de tener en cuenta que esta característica distinguía ciertas botas de entre las miles que se fermentaban. La Fermentación Maloláctica provoca a su vez una disminución de los aromas frutales, lo que incrementaba la diferenciación por parte del responsable de clasificar o registrar las botas.
Los caminos que llevasen a niveles altos de láctico cuando aún se fermentaba en bota pueden ser múltiples, (varios de ellos bajo estudio) algunos ejemplos:

-Variedades autóctonas con un ciclo más tardío que la Palomino. Por lo que al ser vendimiadas a la vez, aportaban más málico que luego podría ser transformado en láctico por las bacterias y en menor medida por las levaduras. A día de hoy se conserva alguna que otra parcela en Trebujena 100% Perruno (Zalema). Del resto de variedades autóctonas solo cepas aisladas. Esta Perruno es la misma variedad que la Zalema del Condado de Huelva. En sus Olorosos puede observarse cierto carácter láctico general, más destacado que en los Olorosos de Palomino. (La actividad microbiológica no está delimitada por ciertas cantidades teóricas. Y dada la condición de paraíso de desarrollo y evolución microbiológica que es la zona del Marco, se pueden ver fácilmente velo de flor en vinos de más de 17% v/v y actividad bacteriana por encima de esos valores y con pHs muy bajos).

-Vendimias más extensas en el tiempo, llegaban a durar hasta mes y medio. La uva de los primeros días presentaba niveles de málico más altos. (Testimonios de varios capataces de bodega responsables de clasificar, apuntan a que un alto porcentaje de las botas marcadas como Palo Cortado procedían de los primeros días de vendimia).

-El sistema de conducción de la viña antes de la entrada de la espaldera sombreaba más los racimos, por lo que se combustionaba menos málico.

-Ciertas botas con alto contenido ºBé inicial o con problemas de fermentación, donde en ambos casos quedaban restos de azúcares: vinos "Pata de Gallina". Estos azúcares, tanto hexosas como pentosas pueden ser fermentados por bacterias lácticas en aerobiosis produciendo grandes cantidades de ácido láctico.

-Mosto de uva afectado por Botrytis con cantidades importantes de glucónico. Este ácido puede ser metabolizado por el velo de flor dando lugar a un incremento de ciertos compuestos con carácter cremoso (cetonas, lactonas, etc), y una disminución del carácter frutal.

-Niveles más altos de cítrico. El ácido cítrico también puede ser transformado en ácido láctico y otros compuestos que pueden favorecer el carácter cremoso-lácteo (diacetilo, acetoína, etc.)

-La fermentación en bota al no tener control de temperatura pasaba fácilmente de los 30ºC. A mayor temperatura se produce una mayor cantidad de Glicerol, en detrimento del Etanol. Este glicerol (glicerina) en reacción con el acetaldehído puede formar mayor cantidad de acetales.

-Un posible error humano en el sulfitado que provocara altos niveles de sulfuroso favorecerían la Fermentación Gliceropirúvica  en menoscabo de la Fermentación Alcohólica,  Ídem del párrafo anterior con la síntesis de mayor cantidad de glicerol.


!!Ufff...!! Como ven ha sido una descripción completísima y exhaustiva de cómo y porqué surgían hace muchos años esos palos cortados que posteriormente se encabezaban a 17-18% vol. y evolucionaban durante años en condiciones oxidativas en soleras de palos cortados, algunos de los cuales han llegado hasta nuestros días.

También en las redes sociales ha dado que hablar este gran trabajo de campo y de bodega que ha llevado a cabo Ramiro para obtener este singular vino, y así nos lo comentaba Ramiro:

"Sobre Encrucijado, lo más importante para nosotros desde el punto de vista histórico es mostraros como sucedieron dos acontecimientos, que serían de mucha “casualidad” que no estuviesen conectados. Por un lado la invasión del Palomino que prácticamente en un siglo pasó de ser minoritaria en algunos pagos -mayormente los jerezanos más continentales, Trebujena, Puerto Real y Chiclana- a coparlo todo poco a poco, siendo estas zonas nombradas, las últimas en mantener estas otras variedades autóctonas. Y por otro la disminución en volumen de los Palos Cortados (“Vino de Jerez”), que pasó de ser el vino de mayor elaboración de todos los jereces a ser un “misterio/accidente/desviación” en la actualidad.


Qué todo este cambio vitícola comience en Sanlúcar primero, a finales del XVIII y en Jerez y resto de zonas fuese más tarde durante el XIX influenció en la ventaja cronológica sobre la longevidad de la crianza biológica y el despegue de la Manzanilla antes que el Fino.
Y que históricamente el Palo Cortado desde su categorización como vino fuese un vino más común en las bodegas jerezanas que sanluqueñas (algunas ni siquiera han tenido nunca este tipo de vino) también puede estar influenciado porque estas otras variedades tardaron más en ser arrancadas y desplazadas en Jerez que en Sanlúcar.

¿Por qué ciertos pagos históricamente han sido designados para un tipo de jerez concreto? ¿Es casualidad que los pagos jerezanos denominados como “frescos” (Añina, Balbaína, ...) e idóneos para finos fueron los primeros jerezanos en ser monopolizados por el Palomino?, ¿Influiría algo que Carrascal de Jerez, renombrado pago para Olorosos tuviesen por aquellas fechas más de la mitad de las variedades con una carga tánica mayor que el Palomino? ¿Casualidad también que el nivel de selección y el gasto de tiza en bodega era mucho mayor cuando los vinos estaban compuestos en su mayoría de combinaciones casi aleatorias de varias variedades en cada bota?...

Con todo este ladrillazo, Guillermo, no consideramos que lo que hacemos sea una rareza, sino la práctica común de hace 150-200 años, donde comenzaban los almacenamientos de vino y el sistema de criaderas y solera, y donde posiblemente un amontillado o palo cortado era tal con 14 ó 15 %v/v y con clasificaciones muy tempranas y vinos relativamente jóvenes, gracias a la marcada diferenciación entre botas. Cosa que hoy es mucho más difícil al ser todo Palomino.

…y continua:

Fijate que cada vez pienso con más firmeza que la tipología de los jereces y sus diferencias organolépticas y de elaboración en sus orígenes estuvo muy influenciada por las posibles variedades que participaban de forma fortuita en cada vino o bota. Variedades con mas finura, otras mas glicéricas, otras que favorecían en mayor o menor medida la supervivencia de la flor, con más o menos tanicidad, más o menos propensa al pardeamiento, etc.. Sin esa ayuda extra de diferenciación los vinos hubiesen sido sin duda todos mas homogéneos...como ocurre en la actualidad.


Bueno, pues así se hizo Encrucijado y así es, un vino muy rico, que he tenido ocasión de catar un par de veces, de color dorado, brillante, con el aspecto de un fino bien criado, ya que no está filtrado. Con aromas intensos y complejos de levadura, bollería, algunas notas florales; recuerdos lácteos como de natillas, cremas de leche, con toques punzantes de manzanilla y de albariza, de tierra, ...
Una boca potente, sabrosa, envolvente, galante, con la sedosidad de una crema, y de largo final.  Un vino de mucho recorrido gastronómico, no tan secante como un fino o una manzanilla, de los de acabarse la botella y pedir otra - si hubiera - con algún guisote sanluqueño. Comprenden ahora los que les dije al principio, no...?

Saludos...

18 sept 2014

Fino La Ina. Bodegas Lustau.

Fino La Ina
Palomino 100%
15% vol.

Bodegas Lustau.
D.O. Jerez.


Beber "La Ina" es comprobar la excelencia de uno de los vinos de Jerez más conocido en todo el mundo, Los paladares más exigentes y refinados cotizan los altos valores que hacen de "La Ina" el vino único para llevar la alegría y el sol de España a todos los lugares de la Tierra. "La Ina" es un Jerez fino, seco, pálido, con un sabor y una fragancia inconfundibles. 
(Texto extraído de un folleto publicitario de 1965)



  



Y así sigue este clásico fino jerezano cuando ya hace seis  años que Bodegas Caballero, a través de su filial Lustau, se hizo con su marca y con todas sus existencias - unas 4000 botas-  de este vino de la antigua casa Domecq. Una solera casi centenaria para un vino que ha visto pasar por delante mucha historia del Jerez.
De Domecq, pasando por algunas multinacionales extranjeras,  hasta Osborne y finalmente Caballero, esta solera fundada en 1919, debe su nombre al Pago de La Ina o "Ahina" a las afueras de Jerez, donde según cuentan tuvo lugar la Batalla del Guadalete al comienzo de la invasión árabe de la península ibérica.
Catado recientemente este vino junto con otros vinos de crianza biológica, se notan en el fino La Ina unos aromas más potentes manteniendo la delicadeza y el punce de estos vinos. Aromas complejos.


En boca es muy seco, con el típico amargor almendrado y marcadas notas salinas. Este carácter más potente es debido a su mayor contenido en acetaldehido y a una mayor acidez que otros vinos, pero mantiene un equilibrio que lo hace muy agradable; un fino para los que gustan de verdad los vinos finos.

18 mar 2014

Oloroso Alburejo

Oloroso Alburejo
Palomino 100%
18.5% vol.
Bodega Alvaro Domecq S.L.
D.O. Jerez


Pues este es un oloroso que no conocía, o por lo menos no lo había probado nunca; de hecho esta bodega es, en cierto modo,  desconocida para mucha gente, aunque sus vinos - y me refiero a "sus vinos" no a sus marcas comerciales - proceden de las antiguas bodegas  - la primera inscrita en el Consejo Regulador - de doña Pilar Aranda, otra gran mujer, y otra gran Pilar, que luchó y peleó hasta la extenuación por sacar adelante el negocio de familiar, la bodega almacenista de su padre Fermín Aranda,  con bomba anarquista en la casa de sus padres incluída, a comienzos de los convulsos años 30 del pasado siglo. La vida de Pilar Aranda es conmovedora, les recomiendo encarecidamente que la lean en el libro: "Nueve Bodegueros del Marco de Jerez (siglos XVIII-XX) Quorum Editores 2010.
Pegamos un salto en el tiempo y nos encontramos en 1998 cuando Alvaro Domecq Romero compra las bodegas Pilar Aranda, bodega almacenista, como lo fue El Maestro Sierra, como lo fué Lustau, y como lo fueron tantos otros, por no tener capacidad, económica sobre todo, para embotellar y vender por sí misma, vinos de calidad criando y envejeciendo, para un tercero, en una bodega de ideales características para la crianza, que pasa a ser Alvaro Domecq S.L. bodega de crianza y expedición. Y hasta hoy, propiedad del grupo Inveravante del empresario gallego Manuel Jové, el de FADESA.
Así que largo, muy largo recorrido el de esta bodega, que elabora toda la gama conocida de jereces, VORS incluídos, brandys, vinagres, etc.
Siempre me ha llamado la atención que muchas bodegas jerezanas emplean el color rojo destacado para sus olorosos, y nunca supe por qué, y este no es una excepción. Alfonso, Gobernador, Rio Viejo, son marcas de olorosos escritas en color rojo. Aquí nos encontramos una etiqueta completamente roja, en contraste con el blanco y con el negro de la botella.
El vino es de color más oscuro de lo normal; un caoba oscuro con algún reflejo cobrizo; no parece muy viejo a pesar de su color, quizás unos 6-7 años de crianza oxidativa, con mucha lágrima, de carácter eminentemente seco, intenso y fragante en nariz, profundo, con notas muy expresivas de tostados, madera muy presente pero madera delicada, fina;  frutos secos como las avellanas.
En boca es rotundo, potente, de nuevo el espíritu de vino seco se afianza en el paladar, sedoso y es muy largo, de gran final. Tiene un final de brandy, me atrevería a decir. Un gran oloroso, desde luego, muy recomendable por unos 9€, para el que quiera saber en qué escalón nos movemos.

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Bodega Alvaro Domecq S.L.
http://www.alvarodomecq.com